El diputado federal del PRI, Héctor Yunes Landa ha mostrado una profunda molestia por las traiciones políticas que ha realizado recientemente su hija, la diputada local Andrea Yunes.
El experimentado legislador ha lamentado la forma en que su vástago (así se escribe, sea hombre o mujer la persona referida) ha mostrado el cobre, pues fue electa por la vía de la lista plurinominal del Partido Verde y a unas horas de rendir protesta en su encargo renunció a su bancada personal (ella era la única) para declararse independiente y “sin jefes políticos”.
Se sabe que ese último machucón le dolió a Héctor, pues hasta hace poco declaraba “mi jefe político es Javier Duarte”.

Nadie sabe que mente maquiavélica aconseja a la Diputada Andrea Yunes para desmarcarse con cinismo del Partido que la cobijó, porque sinceramente nadie le conoce traición alguna al diputado Héctor Yunes Landa a lo largo de su extensa carrera en la cosa pública. “Nadie le dio el ejemplo de traicionar”, dijo un apesadumbrado Héctor Yunes Landa y dicen que arqueó la ceja José Yunes Zorrilla.
Daño colateral
Ante tal noticia, el vocero del Verde en la entidad Marcelo Ruíz no pudo contener el llanto, la legisladora mostró que pasó de lo verde a lo podrido en tiempo récord.
No obstante, después del episodio de amargos sollozos, el dirigente ecologista con el optimismo que le caracteriza, alcanzó a decirle al redactor de esta crónica del sarcasmo con su clásico timbre repleto de disfonía:
“Me enorgullece que con mi liderazgo, el Partido Verde haya tenido a su mejor diputada local, pues como solamente duró unas horas como legisladora verde no le dio tiempo de hacer pendejadas. Las tonterías que haga, las hará pero como diputada independiente”.
Y RECUERDEN: Todo se aprecia de acuerdo al cristal con que se mira…

Aquí una joya de video…