Luis Guillermo Franco
Arlequines y Cortesanos
En su reciente comparecencia en el Senado de la República, el Canciller Luis Videgaray afirmó que él asume toda la responsabilidad sobre la visita de Donald Trump a México cuando aún era candidato presidencial.
El episodio que fue ampliamente criticado por partidos opositores y la prensa nacional fue operado por Luis Videgaray cuando aún despachaba como Secretario de Hacienda. El costo político de tal momento fue su salida del Gabinete Federal de Videgaray.
Al respecto afirmó que la visita nunca fue consentida por la entonces Canciller Claudia Ruíz Massieu, con lo que se asume como responsable histórico de ese evento.
Ese comentario lo realizó precisamente ante la ahora Senadora y Presidenta del PRI, pero más allá de una cortesía política o un gesto caballeroso elemental, en realidad encubre una estrategia perversa por parte de Videgaray.
Aunque el super asesor de Enrique Peña Nieto ha declarado que piensa ya no regresar a la política, en realidad pretende congraciarse con Claudia Ruíz Massieu porque pretende incrustarle a unos recomendados en el CEN y todavía peor: que bajen la guardia y finalmente la actual Presidenta del PRI no obstruya al candidato de Videgaray a sucederla.
Así es, Videgaray miente, los tecnócratas no se retirarán fácilmente del PRI y tratarán de obtener la Presidencia Nacional del Partido en 2019. Videgaray ya tiene su candidato y quiere administrar la miseria desde las sombras.
twitter @luisguifranco @aguilayserpien