Roberto Gil Zuarth encabezará los esfuerzos del calderonismo por recuperar el control del Partido Acción Nacional. Ante la inminente derrota de Ricardo Anaya, sus estructuras se verán naturalmente debilitadas y será la oportunidad de los detractores para tratar de recomponer al PAN.
Gil Zuarth ha mantenido un discurso crítico hacia las componendas pactadas por Ricardo Anaya y de manera muy puntual ha ratificado que votará por el PAN en reconocimiento a sus militantes y su lucha histórica y no por apoyar a su fallido candidato presidencial.
En la lógica política impostergable de que “los carniceros de hoy, serán las reses de mañana”, Roberto Gil Zuarth podrá arropar a todos esos grupos que han estado pasmados ante el avasallamiento institucional de Ricardo Anaya y definir el rumbo para el relanzamiento del PAN como oposición crítica ante el Gobierno Federal.
En el plan del calderonismo (aún superior como corriente que el zavalismo) fue sencillo ubicarle un papel de crítico prudente a Gil Zuarth mientras sacrificaban a Javier Lozano para que se fuera como vocero de Meade y Ernesto Cordero cerró la pinza como Presidente del Senado y acusador ante la PGR de Ricardo Anaya (el tuit donde Calderón afirmó que no estaba de acuerdo, no me lo trago).
El senador con licencia de origen chiapaneco ya había buscado en el 2010 con el apoyo del entonces Presidente Felipe Calderon, hacerse del máximo liderazgo panista pero sucumbió ante Gustavo Madero.
Ahora esta nueva campaña interna la realizará desde el bando de una corriente crítica hacia el grupo que actualmente tiene colonizadas las posiciones del PAN.
Y con Roberto Gil Zuarth en la Presidencia del PAN, será reivindicado Ernesto Cordero y volverán al plan de hacer Presidenta de la República a Margarita Zavala en el 2024.