Teresita Romano
Era una tarde con mucho bochorno, la humedad ambiental sofocaba a los yucatecos que se encontraban esperando al Presidente Electo de los Estados Unidos Mexicanos: Andrés Manuel López Obrador.
El centro de Mérida tenía un viernes festivo, el pueblo asistente mitigaba el calor con aguas frescas y barquillos de limón. Cuando se consumó su arribo, el tabasqueño confirmó ante los presentes su propósito de cumplir a cabalidad con todas las promesas afirmadas durante su campaña.
Mientras recorría el escenario, el líder social más importante que ha tenido México en este siglo, enunció de manera pausada pero enfática cada una de las acciones más emblemáticas que piensa implementar durante su ejercicio gubernamental para lograr lo que en su opinión será “La Cuarta Transformación Nacional”.
Durante su discurso regularmente empuñaba un pañuelo guinda que lucía para quitar los restos de sudor en su frente. Pidió sabiduría para gobernar y entonces atajó que el alza a los salarios sería siempre por arriba del registro inflacionario. Para regocijo de los ahí presentes, las promesas ya fueron acompañadas con números precisos acerca de la inversión pública que tendrá el Gobierno Federal. Hizo una amplia explicación de los beneficios del tren maya del sureste.
AMLO comenzó a proporcionar cifras de dinero que serán enviadas a nuestra entidad para beneficio de la población. En Yucatán 80 mil bachilleres beneficiados con una beca de 800 pesos mensuales. Las pensiones para adultos mayores se duplicarán. Refirió los 2400 pesos que recibirán jóvenes aprendices de oficios y ayudantes en empresas.
Exaltó su terquedad y la presumió ante su público como una virtud que le servirá para gobernar.
Mencionó que durante su gobierno serían reconocidos con mejores salarios policías, médicos, enfermeras y docentes. Dijo que en su gestión no habrá espacios para recomendados ni aviadores.
Asimismo colocó en la primera línea de su gobierno en Yucatán al popular “Huacho” Díaz Mena como coordinador de programas del gobierno federal en el estado y manifestó su interés en articular esfuerzos con el Gobernador Mauricio Vila.
De manera integral, el discurso cubrió los ejes planteados durante la campaña, eso es lo que se espera del Presidente de la República más votado de la historia, pero el gran reto era ver el desempeño de su staff, que no se vieran envanecidos por su cercanía con el líder… aquí mi opinión.
El staff del Presidente
Cumplió Daniel Asaf, el coordinador de la ayudantía del Presidente Electo. Ël se encontró en todo momento atento a las necesidades de su líder. Su equipo de trabajo fue eficiente en su desempeño, porque la seguridad fue discreta, permitió que los yucatecos interactuaran con AMLO y fueron además especialmente comprensivos con las personas que estábamos acreditados como prensa, ya que nos permitieron el acceso de manera rápida y expedita.
Cumplió Jesús Ramírez Cuevas y de manera sobresaliente porque no estuvo presente. El vocero presidencial se encontraba en la Ciudad de México preparando la estrategia para comunicar todo lo alusivo a la consulta nacional para decidir la ubicación del próximo aeropuerto capitalino. Sin embargo se cumplió de manera excepcional porque los medios de comunicación fuimos colocados en un espacio auténticamente privilegiado que nos permitió hacer nuestro trabajo a unos metros de distancia del escenario y sin que nuestra vista se obstaculizara.
Debo resaltar además que fuimos apoyados por Ana Duarte de manera singular. Ana es Secretaria Particular de Jesús Ramírez Cuevas y es de reconocerse que cumplió con esmero y calidez su labor de acreditar y respaldar a los medios locales y nacionales que estuvimos presentes.
